En nuestro país es conocido que las mujeres tienden a rendir más bajo y a participar menos en carreras relacionadas con las matemáticas. 

Esta relativa desventaja ha sido vinculada a temas afectivos, donde las mujeres usualmente reportan sentirse menos confiadas y más ansiosas al realizar matemáticas.
Si bien esto es sabido para el total de la población (por ejemplo, el estudio PISA sobre variables actitudinales), existe muy poca investigación sobre cómo mujeres con una buena relación con las matemáticas negocian esta relación en la sala de clases. 
En esta charla presentaré resultados de un estudio de casos en una sala de clases de séptimo básico ‘típica’ chilena con un foco específico en las experiencias de mujeres con una relación positiva con las matemáticas (buen rendimiento, auto reporte de buena relación afectiva y reconocimiento de sus pares y profesor como ‘buenas matemáticas’). En particular expondré cómo estas experiencias están influidas por ideas respecto de las matemáticas que dificultan o facilitan una relación positiva en el presente y en el futuro (por ejemplo, que las matemáticas requieren de un talento innato) y cómo estas ideas influyen la forma en la que estas niñas actúan y se relacionan con sus pares en la sala de clases. 
A partir de los resultados discutiré implicancias para la posición de las mujeres en las salas de clases y en un eventual futuro en carreras y trabajos relacionados con esta área